Mercedes Barcha: La musa y mano derecha de Gabriel García Márquez

Todas hemos leído al menos una de las obras del gran Gabriel García Márquez. Su ingenio y sus ganas de escribir tenían un motivo importante, y esa razón era Mercedes Barcha, su musa, su mano derecha y su principal crítica. Ella, quien ayudó a que se haga posible el lanzamiento de “Cien años de soledad”, falleció el pasado sábado dejando un profundo pesar en Colombia y en el mundo.

“La Gaba” como la llamaban, tenía 87 años y según información difundida por medios locales, falleció a causa de afecciones respiratorias, de las cuales padecía mucho antes de la aparición de la COVID-19, en la Ciudad de México, dónde, hace seis años, el famoso escritor dejaba de existir.

Mercedes, fue siempre el principal soporte del nobel de literatura, especialmente en los tiempos en los que el dinero escaseaba en casa, pues para ella no fue impedimento deshacerse de sus joyas y demás cosas con el objetivo de ayudar a su amado a que publique su novela “Cien años de soledad”, que tiempo después, se transformaría en un tesoro de la literatura contemporánea.

Así era Mercedes, una mujer reservada, casi anónima, que en toda su vida solo ha dado tres entrevistas, como lo refiere Héctor Feliciano, uno de los periodistas que tuvo la suerte de hablar con la mujer que compartió 56 años de su vida al lado de Gabriel.

¿Cómo nació el amor entre Gabriel y Mercedes?

Según algunos biógrafos, Mercedes y Gabriel se conocieron en 1941 luego de que el padre de Mercedes abriera una farmacia. Desde ese momento, Gabo quedó muy enamorado de ella e hizo todo lo posible por estar cerca, incluso, se hizo muy amigo de su padre.

Con el pasar del tiempo, Gabriel ya pertenecía al Grupo Barranquilla, integrado por escritores y periodistas y en 1950, escribía la columna “La Jirafa”, donde publicó una columna llamada “La amiga”, describiendo a Mercedes, obviamente sin revelar su nombre.

La historia de amor comenzó cuando Gabriel se fue a Europa. En una de sus escalas, el gran Gabo decidió enviarle una misiva a su amada.

“Yo le decía en la carta, si no recibo respuesta, no volveré a Colombia”. Pero Mercedes si contestó y así nació un amor puro, sincero, sin prisas ni pausas y luego de 13 años, se comprometieron y 4 años mas tarde, contrajeron nupcias. Fruto de su amor, nacieron dos hijos: Gonzalo y Rodrigo.

Ahora, luego de la muerte de Mercedes, los esposos volverán a unirse en un ligar mejor, para seguir disfrutando de su compañía mutua, así como de las grandes historias de Gabriel García Márquez.