La primera Cafetería mexicana es atendida por personas son Síndrome de Down

Coffe Cordica 21 es una cafetería mexicana que está instalada en Guadalajara y llamado la atención de los ciudadanos ya que es la primera cafetería en ser atendida por personas con Síndrome de Down.

Esta cafetería se propuse ser une los mejores establecimientos de café, peor el mismo tiempo tiene un gran propósito social y es darle una mejor calidad de vida a las personas que padece de Síndrome, muchos consideran que estas personas no pueden ejercer algún trabajo como cualquiera.

Sin embargo, ellos no son tan diferentes e incluso poseen muchas habilidades interesantes, esta cafetería cuenta con 10 jóvenes entre los 20 y 25 años que padecen de este trastorno, lo mejor es que reciben apoyo y capacitación constante para seguir desarrollándose.

Además, la cafetería ofrece otro tipo de talleres para estos jóvenes como talleres de pintura, baile, deportes y repostería, estas actividades lo realizaran dos veces por semana.

¿Cómo nació Coffe Cordica 21?

Cordina nació primero como un club deportivo de futbol para persona con Síndrome de Down, al pasar el tiempo se fue comportando en una organización de talleres “Más que un negocio se trata de una cafetería-escuela, donde los chicos aprenderán a ser productivos por sí mismos, para que en un futuro aspiren a proyectos más grandes. Sólo queremos acompañarlos en cada etapa de su vida y ayudarlos a que desarrollen cada una de sus capacidades en un entorno de inclusión” comentó la una de las integrantes del proyecto, Laura Ruiz.

En primer lugar, tenemos que contarles que el trabajo de estos jóvenes es remunerado, la labor que llevan lo trabajan en grupos de dos o tres turnos y por cada turno se trabaja dos horas. Además, se apoyan entre todos y siempre están bajo la supervisión de un jefe para cualquier circunstancia.

Esta noticia se hizo viral en redes sociales y ha conmocionado a miles de usuarios, personas que se encuentran cerca al local no han dudado en ir a visitarlo y disfrutar de una buena taza de café y mejor aún, de darse con la sorpresa de ver a estos jóvenes seguros y capaces de integrarse.