Pasar dos horas semanas en la naturaleza pueden ser beneficiosas para la salud, según estudio

Chicas, no cabe duda que el tiempo libre que tengamos siempre va a ser un tema complicado para muchas de nosotras. Y es que la sociedad nos ha llevado a pensar que lo que hagamos con nuestro tiempo de ocio tiene que venir acompañado con algún beneficio para nosotras.

Muchas suelen utilizar su tiempo libre para ir al gimnasio, visitar amigas, leer o ir al cine. Esto no quiere decir que estas actividades no sean buenas, sino que la mayoría de ellas pueden estar siempre relacionadas con intentar tranquilizarnos, pero acompañadas de alguien.

Sin embargo, hablar sobre este tipo de actividades también es conversar sobre lo que puede ser un reencuentro con algo que seguramente a muchas de nosotras nos ha gustado desde niñas: Los parques. Aquellos lugares a los que íbamos acompañadas de nuestros hermanos mayores, padres o primos, que nos ayudaron a socializar más con nuestro entorno e incluso hacer amigos de paso.

De este modo, un reciente estudio ha revelado que pasar al menos dos horas semanales en la naturaleza puede tener un impacto más que significativo en nuestra salud física y el bienestar mental. Tal y como lo desarrollaron los investigadores de la Universidad de Exeter, dedicar tiempo a actividades al aire libre están asociadas con una mejor calidad de vida y una mayor satisfacción personal.

El estudio que arrojó el resultado de que las personas que cumplen con más de 120 minutos semanales eran más propensos a mostrar una mejor salud que a los que no cumplían con este tiempo. Además, destacaron que no importaba cómo estuviese distribuido este tiempo, siempre y cuando se cumpliera con la cantidad final. 

Cabe mencionar que este tipo de investigaciones obviamente no se aplican a todos los casos, ya que el estrés y la tensión que puede sentir una persona también puede ser liberado a través de otras formas como el ejercicio en la azotea o incluso el trotar cerca de casa. Aunque puede parecer algo lógico, lo cierto es que todos deberíamos cumplir con una cuota necesaria de tiempo fuera de nuestro hogar, tanto para desahogarnos como para sentir el aire fresco que en tantas oportunidades nos hace falta.